La barrera hematolaberíntica: diana terapéutica para tratar hipoacusias neurosensoriales

La barrera hematolaberíntica, una nueva diana terapéutica para el tratamiento de hipoacusias neurosensoriales raras

Investigadores del grupo de Neuropatología de la Audición y Mielinopatías junto con la Dra. Pilar López- Larrubia del Instituto de Investigaciones Biomédicas Sols-Morreale (CSIC-UAM) han publicado datos novedosos sobre la alteración de la permeabilidad de la barrera hematolaberíntica del oído interno y proponen un fármaco, SPT-2101, que ya está siendo evaluado en ensayos clínicos para el tratamiento de la enfermedad de Ménière.

​​La barrera hematolaberíntica (BLB) del oído interno es una estructura similar a la barrera hematoencefálica del cerebro, con una permeabilidad selectiva que deja pasar oxígeno y nutrientes a la cóclea, pero evita la entrada de agentes dañinos, tóxicos o infecciosos. La alteración de la permeabilidad de la BLB es un mecanismo patológico poco conocido, que se ha asociado a enfermedades raras como la enfermedad de Ménière, así como a otras formas de hipoacusia neurosensorial (autoinmune, infecciosa, inducida por ruido, etc).

En este trabajo, el grupo de Neuropatología de la Audición y Mielinopatías y la Dra. Pilar López- Larrubia del Instituto de Investigaciones Biomédicas Sols-Morreale (IIBM) y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Raras (CIBERER) ha profundizado en las bases moleculares, celulares y funcionales de este proceso, utilizando un modelo animal de daño auditivo inducido por lipopolisacárido bacteriano (LPS), un potente inductor de inflamación. Además, se evaluó la eficacia de una nueva formulación de dexametasona de aplicación local. Para ello se utilizaron técnicas de evaluación in vivo no invasivas, tales como los potenciales evocados auditivos de tronco cerebral (ABR) y la resonancia magnética con contraste dinámico (DCE-MRI), así como RT-qPCR, arrays de PCR y montajes en plano de la estría vascular, entre otras.

“Los resultados obtenidos muestran que LPS produce una alteración de la permeabilidad de la BLB desde las primeras horas tras su administración, y esto se asociaba con cambios en la expresión de genes de inflamación”, nos cuenta Silvia Murillo-Cuesta, primera autora de este trabajo. El array de PCR determinó que existen patrones de expresión concretos, que van cambiando a lo largo de las primeras 72 h. Algunos de los genes clave validados por RT-qPCR incluyen el receptor de LPS Tlr2 y el co-receptor Cd14, citoquinas y receptores proinflamatorios como Il1b y ll1r1, y también los mediadores del estrés oxidativo y del inflamasoma NRF2 y NLRP3. La administración intratimpánica de dexametasona formulada como SPT-2101 (Spiral Therapeutics) evitó la alteración de la permeabilidad de la BLB y redujo la pérdida auditiva en las ratas que recibieron LPS. Sus afectos fueron similares a la administración de dosis repetida de dexametasona sistémica, evitando así los efectos secundarios. A nivel molecular la administración del fármaco SPT-2101 moduló los cambios de expresión y redujo notablemente el proceso inflamatorio en la cóclea.

Este trabajo, que lleva por título: “Protection of lipopolysaccharide-induced otic injury by a single dose administration of a novel dexamethasone formulation”, ha sido recientemente publicado en Translational Medicine Communications.

En la imagen se muestra un montaje en plano de la estría vascular del oído interno de rata; situación basal a la izquierda y tras la administración de lipopolisacárido bacteriano a la derecha.